Lo creáis o no, en casa no suele haber tarta más que en contadas ocasiones, y éstas no siempre han de coincidir necesariamente con celebraciones señaladas.
Es prácticamente imperdonable, del todo incomprensible, que a estas alturas aún no hubiera publicado en el blog la receta de la mítica Hummingbird Cake (literalmente "tarta colibrí", que si no la conocéis os juro por mi honor que no incluye pajarillos ni ave alguna entre sus ingredientes).
Estoy más que emocionada hoy, pues os traigo una receta de esas que difícilmente pasan desapercibidas. Y algo más... Que esta Pavlova de chocolate os va a enamorar perdidamente es casi una apuesta segura.
Generalmente las tartas tipo layer cakes se suelen reservar para fechas señalas o celebraciones destacadas. Pues ésta no se ajusta a esa máxima. O sí; siempre hay algo que celebrar, ¿verdad?
Pese a que las recetas rápidas y sencillas suelen ser una opción más que atractiva en determinados casos, en otros, sin embargo, apetece dar rienda suelta a esa otra faceta nuestra que nos pide un poco de "aventura" culinaria...
¡Estoy escandalizada! Pero ¿cómo es posible que haya pasado todo este tiempo desde la última vez que publiqué una señora tarta, con toda su presencia y encanto indiscutibles?
No suelo publicar los sábados, pero esta vez haré una excepción. Sabéis que me encanta preparar una tarta especial para los cumples de casa.