La receta de hoy va dirigida especialmente a todos aquellos que disfrutáis de una buena dosis de acidez en vuestros momentos más dulces.
Uno de los últimos y más reveladores descubrimientos en cuanto a recetas se refiere, fue darme cuenta de que el placer de saborear un buen gofre no tenía por qué acabar después de probar la clásica y venerada versión por todos conocida: los tradicionales gofres belgas.
Cuando pensamos en cumpleaños —como veis, seguimos saboreando los buenos momentos— es fácil que nos invadan inmediatamente toda una serie de imágenes e ideas asociadas.
Me encanta esta época del año; la luz, los colores, los nuevos aromas… Y al menos por estas latitudes, no hace ni calor ni demasiado frío.
Mirando detenidamente estos muffins de limón con semillas de amapola, no me puedo creer que siete meses atrás publicara la primera receta de muffins del blog y desde entonces no haya caído ninguna otra.