- Si tenemos 2 bandejas de horno iremos el doble de rápido. Colocaremos una en la mitad superior y la otra en la mitad inferior. Cuando las galletas lleven ya la mitad del tiempo de horneado, intercambiamos y giramos las bandejas, es decir, la de arriba la ponemos abajo y la parte frontal la volteamos para que quede mirando hacia dentro y viceversa, así se hornearán uniformemente. Este paso hay que hacerlo con cierta rapidez para no perder el calor del horno y que no se enfríen las galletas a medio hornear.
- Antes de volver a poner una nueva tanda en la bandeja, hemos de esperar a que ésta se enfríe.
- Cuando están calientes, las galletas tienen una consistencia muy blanda y por lo tanto son muy frágiles, así que hay que manipularlas con cuidado. Conforme se enfrían se endurecen.
- Mucha atención, el colorante nos manchará las manos, así que hemos de tener la precaución de no tocar nada hasta que consigamos lavárnoslas bien a fondo o utilizar guantes de latex.
- En vez de teñir el fondant blanco, también podemos comprarlo ya del color que necesitemos directamente. En este caso, como de antemano no sabía cuánto iba a necesitar de cada color, preferí ir tiñéndolo según lo iba necesitando.
- Día nacional de las sugar cookies: 9 de julio.