Si algo tiene la entrada que os traigo en esta ocasión, además de una combinación de ingredientes verdaderamente excepcional, es un largo recorrido.
Serán las vacaciones, la primavera o una tendencia natural, pero últimamente hay algo que me apetece por encima de todo lo demás y es cocinar y disfrutar del desayuno hasta bien entrado el día (es decir, durante toda la mañana).
Os confieso que la receta de hoy ha sido uno de mis últimos felices descubrimientos. Se trata de todo un decadente, irresistible y perfectamente acompañado Apple Dutch Baby. Sólo el nombre ya me cautivó, pese a que puede que sea uno de los platos de apariencia menos fotogénica que haya hecho hasta la fecha...
Uno de los últimos y más reveladores descubrimientos en cuanto a recetas se refiere, fue darme cuenta de que el placer de saborear un buen gofre no tenía por qué acabar después de probar la clásica y venerada versión por todos conocida: los tradicionales gofres belgas.